Varices durante el embarazo.

Varices de las extremidades inferiores durante el embarazo.

Las venas varicosas durante el embarazoes la dilatación de las venas que se produce durante el embarazo y está relacionada con la etiología. Se manifiesta por severidad, parestesias, dolor, hinchazón, espasmos musculares y lesiones cutáneas nutricionales en miembros inferiores y genitales externos. El diagnóstico se realiza mediante inspección, método de exploración de vasos sanguíneos por ultrasonido. Durante el embarazo, el tratamiento suele limitarse a la terapia de compresión para corregir el sueño y el descanso, la actividad física y la nutrición. Tal vez designe flebotónicos, fleboprotectores, anticoagulantes, medicamentos antiplaquetarios. El tratamiento quirúrgico generalmente se realiza después del parto.

Información general

Las venas varicosas (várices) son una de las enfermedades vasculares más comunes asociadas con el embarazo. Según la investigación, hasta un 15-20% de las personas padecen enfermedad venosa, de las cuales 2/3 son mujeres, y el 60-80% de los casos de dilatación venosa son causados ​​por el embarazo. Esta enfermedad generalmente se diagnostica por primera vez en pacientes jóvenes, con un 75% de los pacientes menores de 30 años. En más de dos tercios de los casos, la clínica de venas varicosas abrió después de la semana 20 del primer embarazo. La relevancia del diagnóstico oportuno de las venas varicosas está relacionada con la alta probabilidad de insuficiencia placentaria y el riesgo de complicaciones tromboembólicas fatales en ausencia de un tratamiento adecuado.

Razón

Teniendo en cuenta los datos estadísticos sobre la incidencia de las venas varicosas durante el embarazo, la mayoría de los obstetras y ginecólogos creen que la enfermedad es una complicación del embarazo. En el 91% de los pacientes, la causa de la vasodilatación es la falla determinada genéticamente de la vaina de la vena media, en la que se reduce la cantidad de colágeno y aumenta el contenido de polisacáridos.

Contribuir al desarrollo de venas varicosas en mujeres que son susceptibles a la aptitud física durante el embarazo.

  • Aumento del volumen de sangre circulante. El aumento de BCC en mujeres embarazadas varía del 30-50% (si nace un niño) al 45-70% (si hay 2 o más fetos en el útero). Este mecanismo de compensación puede proporcionar suficiente sangre para los órganos vitales y el sistema placentario de los niños, las mujeres.
  • Cambios hormonales durante el embarazo. Durante el embarazo, los ovarios y la placenta secretan fuertemente progesterona y relaxina. Bajo la acción de estas hormonas, las fibras musculares lisas de las venas se relajan y los tejidos conectivos experimentan una reconstrucción estructural. Como resultado, a medida que aumenta la presión venosa, el tratamiento de la pared del vaso empeora.
  • La compresión de los vasos sanguíneos del útero durante el embarazo. El útero en crecimiento comprime la vena cava inferior y las venas. El flujo de sangre que sale de la pelvis y las extremidades inferiores se ve afectado y la presión intravascular aumenta, lo que hace que las paredes de las venas se estiren. Después de la semana 25 de embarazo, la influencia de este factor juega un papel clave en la formación de varices.
  • Cambios en el sistema hemostático. A medida que se acerca el parto, la actividad fibrinolítica de la sangre disminuye y aumenta el número de factores de coagulación. Este mecanismo adaptativo tiene como objetivo reducir la cantidad de sangre perdida fisiológica durante el parto. Esto aumenta la posibilidad de trombosis venosa patológicamente alterada.

Otra causa de varices en mujeres embarazadas es la reducción de la actividad física. Debido al trabajo insuficiente del músculo esquelético, aumenta el estancamiento de sangre en las piernas y la pelvis. En el caso de sobrepeso la situación se agrava, en cuyo caso la cantidad de sangre que circula en el lecho vascular del paciente es aún mayor.

Patogenia

El punto de partida para el desarrollo de venas varicosas durante el embarazo es destruir la capacidad compensadora del dispositivo de válvula de red venosa. Debido al aumento de BCC y la obstrucción mecánica del flujo de las extremidades inferiores, cuando se aprieta la vena principal, la sangre ejerce una mayor presión sobre la pared del vaso. Bajo la acción de la progesterona, la relajación del músculo liso vascular puede mejorar la falla hereditaria de las fibras del tejido conectivo. Como resultado, el lumen venoso se expande, la válvula deja de cerrarse y la sangre se deposita en el sistema vascular de las extremidades inferiores. A medida que avanza la enfermedad, el proceso patológico puede extenderse a los vasos sanguíneos del anillo de la vulva, la vagina y la pelvis pequeña.

Clasificación

Los principales criterios para sistematizar las varices son la prevalencia anatómica de estasis venosa y la gravedad de la enfermedad. Este método permite diferentes opciones de tratamiento para diferentes variantes de la enfermedad. Teniendo en cuenta la participación de varios órganos en este proceso, se distinguen las venas varicosas de las extremidades inferiores, las venas varicosas vulvares y las venas varicosas pélvicas. Según la gravedad de los síntomas clínicos, se puede dividir en las siguientes etapas de vasodilatación venosa de miembros inferiores:

  • Venas varicosas. No hay signos de dilatación de los vasos sanguíneos externos y la mujer embarazada nota fatiga en las piernas al final del día, malestar en los músculos de la pantorrilla durante el ejercicio y caminata rápida.
  • Compensación por venas varicosas. Aparecen estrías vasculares ("estrellas") en la piel. Hinchazón de las piernas por la noche, calambres, entumecimiento y dolor por la noche. El tiempo de curación de las abrasiones y raspaduras es más largo de lo habitual.
  • Compensación por venas varicosas. El paciente sigue preocupado por el dolor y el aumento de la hinchazón en la pierna. Las venas son obviamente agrandadas y nódulos. Pigmentación de la piel. Hay signos de eccema y trastornos nutricionales.

Las venas varicosas pélvicas de las mujeres embarazadas también se desarrollan gradualmente. En la primera etapa, el diámetro de los vasos sanguíneos afectados en cualquier plexo venoso de la pelvis no supera los 5, 0 mm. En segundo lugar, el útero o los ovarios están involucrados en este proceso y la cavidad vascular mide 6. 0-10. 0 mm. La tercera característica es que la vena se dilata más de 10 mm, causando un daño completo a todo el plexo nervioso venoso pélvico.

Síntomas de las venas varicosas

En el 80-82% de los pacientes, la enfermedad se sentirá pesada y tensa cuando aparece por primera vez, y las piernas “zumbarán” y aumentarán durante la noche y durante el esfuerzo físico. Los síntomas de las varices aumentan gradualmente. A medida que la enfermedad progresa en ciertas partes de los músculos, aparecerá dolor, que se desarrolla primero al estar de pie y al trabajo físico por un tiempo prolongado. En los casos más graves, el dolor se vuelve constante y la intensidad del dolor es tan obvia que las mujeres embarazadas encuentran dificultades para hacer ejercicio de forma independiente. Hasta el 60% de los pacientes notaron calambres en los músculos de la pantorrilla, hasta un 40-50% de sensibilidad disminuida, entumecimiento en las piernas, hasta un 30% de picazón.

Durante la fase compensadora de las varices, hay signos externos de dilatación de las venas superficiales. Primero, los vasos sanguíneos reticulares y las áreas de telangiectasia ("reticulares" y "estrelladas") se forman en la piel. Posteriormente, el patrón de las venas se vuelve obvio. Las venas parecen expandirse, girar en espiral y, finalmente, volverse nodulares. La aparición de edema en la zona del tobillo y la pantorrilla demuestra la extensión del proceso de dilatación a los vasos sanguíneos profundos. A medida que se descomponen las varices, la piel de las piernas se ve pigmentada y se forma un eccema. Si la patología ocurre mucho antes del embarazo y el tejido graso subcutáneo está desnutrido, pueden aparecer úlceras tróficas.

En el 4% de los pacientes, la enfermedad afecta las venas de la vulva, la vagina y la pelvis pequeña. Para las venas varicosas vulvares y vaginales, se observan molestias, hinchazón, pesadez y picazón en el área genital externa. El perineo y los labios pueden hincharse y sangrar por contacto vaginal después del coito. El síndrome de congestión pélvica se manifiesta como una distensión o dolor en la parte inferior del abdomen, que se irradia a la parte inferior de la espalda, los huesos, la ingle y los genitales externos. La dispareunia es una característica de las relaciones sexuales. En casos graves, se detecta disuria.

Complicaciones

En ausencia de un tratamiento adecuado, las venas varicosas de las mujeres embarazadas cambiarán debido al desarrollo de úlceras nutricionales, erisipela, tromboflebitis, trombosis venosa superficial y profunda y tromboembolismo de las arterias pulmonares y otros vasos sanguíneos grandes durante el trabajo de parto. Es complicado. En el 40-45% de los casos, la insuficiencia placentaria se acompaña de hipoxia fetal aguda y crónica. En el 25% de los pacientes, se observó un parto anormal (trabajo de parto insuficiente, desregulación de la contracción del miometrio). En el caso de las varices vaginales, pueden producirse muchos traumas después del parto. Casi un tercio de las mujeres trabajadoras tienen defectos en la separación y secreción placentarias. Las consecuencias a largo plazo de las varices durante el embarazo son las hemorroides, que provocan insuficiencia venosa crónica y dolor pélvico.

Diagnóstico

Con la aparición de síntomas cutáneos característicos, el diagnóstico de varices durante el embarazo no suele presentar ninguna dificultad. La tarea de la etapa de diagnóstico es determinar la etapa y ubicación de la expansión de la vena para descartar otras causas que puedan causar el estancamiento del sistema vascular de la extremidad inferior. El método de encuesta más útil es:

  • Verificación del presidente. Este estudio reveló cambios característicos en las venas de la región vulva y en la parte interna del muslo: nódulos tortuosos y dilatados. Es posible la hinchazón de los labios y el perineo. Al mirar en un espejo, la mucosa vaginal se ve hipertrofiada y peluda. La bóveda vaginal a la palpación con ambas manos es suave y generalmente dolorosa.
  • USDG en el sistema venoso. Durante la ecografía, se evalúan la forma y el diámetro del vaso sanguíneo, su longitud, ubicación anatómica y estado de la pared. Este método permite determinar el área de la rama, la consistencia del dispositivo valvular, la permeabilidad de la vena, la presencia y la dirección de la regurgitación. Puede escanear los vasos sanguíneos de las extremidades inferiores y la vena cava inferior (ecografía IVC).
  • Doble exploración de los vasos sanguíneos de las piernas. La ventaja de un método no invasivo que combina el ultrasonido tradicional y la investigación Doppler es no solo obtener información detallada sobre los parámetros del flujo sanguíneo, sino también mostrar la red venosa. La exploración vascular de doble cara se utiliza para evaluar de forma integral el estado de los vasos sanguíneos superficiales, perforados y profundos.

Durante el embarazo, debido a la posibilidad de efectos negativos en el feto, los métodos de diagnóstico radiológico (várices, imágenes ováricas selectivas, venografía ascendente de las extremidades, venografía pélvica, venografía por tomografía computarizada, venas) solo se utilizan en un rango limitadoGammagrafía, etc. ). En casos difíciles, si se sospecha de várices pélvicas, el diagnóstico laparoscópico debe realizarse con precaución. El diagnóstico diferencial de las varices en las piernas incluye edema, insuficiencia cardíaca, linfedema y trombosis aguda del sistema venoso de la mujer embarazada. Las venas varicosas de la pelvis pequeña deben distinguirse de la endometriosis genital, patología inflamatoria crónica de los órganos pélvicos, fibromas uterinos submucosos y serosos, quistes y otros tumores ováricos. Además de observar a los obstetras y ginecólogos, se recomienda que los pacientes consulten a médicos, cardiólogos y oncólogos intravenosos.

Tratamiento de las venas varicosas durante el embarazo

El objetivo principal del tratamiento de las venas varicosas para mujeres embarazadas es detener la progresión de la enfermedad, reducir la gravedad de los síntomas clínicos y prevenir posibles complicaciones tromboembólicas. Los métodos no farmacológicos se consideran recomendables y, si es necesario, complementados con medicamentos durante un embarazo seguro:

  • Terapia de compresión. Se recomienda que las mujeres que han sido diagnosticadas con varices lo usen diariamente durante el embarazo, usen vendas elásticas, medias de compresión especiales o 1-2 medias de compresión durante el parto y posparto. La terapia de compresión al reducir mecánicamente el diámetro de las venas superficiales puede acelerar el flujo sanguíneo y reducir la hinchazón y la congestión.
  • Flebotónicos y fleboprotectores a base de hierbas. El efecto del uso de este grupo de fármacos está relacionado con un aumento de la tensión de la pared venosa, disminución de la permeabilidad, mejora de la microcirculación, reología sanguínea y flujo linfático. La ventaja de la mayoría de los bioflavonoides es que pueden usarse durante el embarazo y la lactancia. Los medicamentos intravenosos se pueden usar en forma de tableta o externamente.
  • Anticoagulantes y medicamentos antiplaquetarios. Cuando existen signos de tendencia a aumentar la coagulación y la amenaza de desarrollar CID, los medicamentos con efectos antitrombóticos deben usarse con precaución. Para mejorar la reología de la sangre y la microcirculación vascular, se han demostrado fármacos que pueden prevenir la agregación plaquetaria y tienen un efecto protector vascular.

Se recomienda que las mujeres embarazadas con varices realicen ejercicios especiales de fisioterapia, masaje de drenaje linfático, caminar según la dosis y ducharse en incrementos todos los días. La corrección de la dieta implica comer alimentos ricos en fibra y grasas vegetales. En casos especiales con enfermedad grave, síndrome de dolor intenso y complicaciones, se pueden utilizar escleroterapia por inyección, microfibrectomía, resección cruzada, coagulación láser intravascular y otros tratamientos quirúrgicos. En la mayoría de los casos, la corrección quirúrgica se realiza al final de la lactancia.

Estrategia de publicación

El método preferido de parto para las venas varicosas es el parto natural, con vendajes elásticos o prendas de compresión aplicadas a las extremidades inferiores de las mujeres desde el principio. Los pacientes con varices vulvovaginales deben prestar especial atención a mantener la duración y realizar una episiotomía protectora según las indicaciones. Cuando la vena dilatada se rompa, ligue con cuidado el vaso sanguíneo ligado y suture la masa nodular repetidamente. Se recomienda la cesárea en pacientes con alto riesgo de complicaciones tromboembólicas y venas varicosas graves.

Predicción y prevención

Mediante la detección oportuna y el tratamiento adecuado, el pronóstico es bueno. Como precaución, se recomienda dormir lo suficiente por la noche y descansar regularmente en posición supina durante todo el día, con las piernas colocadas sobre una superficie firme en un ángulo de 30 °. Las mujeres embarazadas con genética pesada deben negarse a usar zapatos con tacones que excedan los 5 cm, limitar el tiempo de estar de pie o de pie y controlar el aumento de peso.

Para prevenir las varices, realice una caminata diaria y reduzca la ingesta de sal. Es efectivo tomar preparados vitamínicos que fortalezcan la pared de los vasos sanguíneos. Según las indicaciones, las pacientes con varices que planean quedarse embarazadas deben someterse a una cirugía para corregir la enfermedad.